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El mundo del cuidado de la piel puede ser algo complicado de entender y conocer en un principio, sobre todo porque hasta ahora y como hombres, probablemente nunca nos habíamos preocupado de este aspecto.
Y si, existen actualmente múltiples rutinas y productos que pueden tener más o menos beneficios, o que pueden ser más o menos fuertes y potencialmente agresivos según nuestra piel, pero en este artículo te hablaremos de lo básico, de esos productos por los que sí o sí deberías empezar.
Los esenciales son tres, partamos por el primero:
1. El limpiador facial.
Es el punto de partida de cualquier rutina facial. ¿Por qué? Simple: tu cara acumula constantemente suciedad, grasa y células muertas durante el día. Un limpiador lo que hace es eliminar todo eso sin la necesidad de resecar la piel.
Nuestra recomendación es que elijas uno suave y que no deje tu cara tirante después de usarlo.
Recuerda, no es lo mismo que usar jabón. El limpiador está formulado para mantener el equilibrio de tu piel.
2. La crema hidratante. (nuestro favorito)
Después de limpiar, hay que hidratar. Tu piel pierde agua constantemente y, como nosotros mismos, necesita reponerla para mantenerse saludable y funcionar correctamente.
Una piel bien hidratada no solo se ve bien, sino que también se defiende mejor contra el envejecimiento y las agresiones externas. Funciona como una barrera protectora, manteniendo lo bueno adentro y lo malo afuera.
Te recomendamos una que se absorba rápidamente, que sepas que tiene múltiples nutrientes y que no deje una sensación grasosa. Esto último dependerá mucho de tu piel.
Por lo mismo te sugerimos irte a la segura con nuestra crema hidratante de fórmula ultraligera diseñada para todos los tipos de piel. ;)
3. El protector solar.
¿Te acuerdas cuando eras niño y tu mamá siempre te decía que te pusieras bloqueador, incluso si no estabas en la playa? Siempre tuvo razón. El sol es el factor número uno del envejecimiento prematuro de la piel. Un buen protector solar te protege contra las arrugas, las manchas, y lo más importante, el cáncer de piel producido por los rayos UV.
Recomendamos que escojas uno con un Factor de Protección Solar (FPS) de al menos 30 y usarlo todos los días.
Aunque las nubes bloquean parte de la radiación UV, hasta el 80% de los rayos pueden penetrar a través de ellas. Los días nublados pueden ser engañosos, así que es mejor protegerse siempre.
La rutina básica
Ahora que conoces los productos esenciales, aquí tienes una rutina simple para empezar:
- Mañana: Limpia, hidrata, protege (en ese orden).
- Noche: Limpia e hidrata.
Eso es todo. No necesitas más para empezar. La clave está en la constancia. Hazlo todos los días y verás resultados en unas semanas.
Recuerda, cuidar tu piel no es algo vanidoso, más bien demuestra que te preocupas por ti y por tu salud.
En Ronel estamos para acompañarte en este camino. Nuestros productos están diseñados pensando en ti y en tus necesidades.
¿Estás listo para empezar?